En Lisboa, subir al Elétrico 28 no es subirse a un tranvía cualquiera. Para Amadeo, su conductor, hacer bajar, girar, zigzaguear…su magnífico tranvía amarillo tiene un propósito secreto. Un simple trayecto se puede convertir en un viaje lleno de sorpresas… ¡y de besos!
Una historia con mucho sentido del humor en el que su protagonista, Amadeo, aprovecha sus trayectos en tranvía para hacer de Celestina. Cuando se jubila, el azar querrá que su sustituto también lo empareje a él.